Según el estudio de Moody’s, publicado en Cinco Días, en estos momentos sólo dos marcas están listas para afrontar con un posicionamiento avanzado la transición energética en el sector del automóvil. El primero es Tesla, que ya nació como fabricante 100% de vehículos eléctricos, y no utiliza otros tipos de motorizaciones.
El estudio de Moody’s evalúa qué tan preparados están los 20 fabricantes de coches más grandes del mundo para beneficiarse de un futuro más restrictivo con las emisiones de gases contaminantes. El análisis toma en cuenta una serie de consideraciones, como la proporción de vehículos eléctricos o híbridos producidos o en desarrollo, los acuerdos con provee- dores para asegurarse el suministro de baterías, y su exposición a las políticas medioambientales en sus principales mercados.
En una escala del 1 al 10, el estudio da a las 20 compañías una puntuación promedio de 6, lo que indica “un posicionamiento moderado”.
Esto significa que aproximadamente la mitad de los fabricantes “no están en una posición sólida para manejar la transición energética”, para lo cual, según la agencia, haría falta “un cambio radical”, tanto en la estrategia de producción como de la venta de vehículos eléctricos, así como en el nivel de inversión en nuevas tecnologías.
El informe agrupa a las marcas en cuatro categorías según su capacidad para adaptarse a una economía baja en carbono.Las categorías son: Posicionamiento avanzado, Fuerte, Moderado y Deficiente
Honda se sitúa en el grupo de marcas con un fuerte posicionamiento ante la descarbonización. De todas las marcas analizadas, Honda se sitúa como la cuarta. Es un dato muy importante, teniendo en cuenta que los dos primeros fabricantes nacieron con modelos 100% eléctricos. Tesla, una empresa que nació en Silicon Valley para impulsar el transporte sostenible, y Beijing Automotive, compañía estatal con sede en Pekín y holding de varios fabricantes chinos, entre ellos Arcfox, marca especializada en eléctricos.
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