Tengas el vehículo que tengas, todos podemos contribuir con nuestro granito de arena para proteger el planeta. Mientras transitamos hacia la movilidad sostenible, saber conducir para minimizar el consumo de combustible es clave. Incluso cuando hablamos de vehículos híbridos, como los modelos Jazz, CR-V o HR-V de Honda. Si bien ya se caracterizan por su eficiencia, una conducción inteligente nos puede ayudar a ahorrar dinero y energía.
1- Planifica la ruta
Si tienes claro cómo llegar a tu destino antes de partir, podrás diseñar un recorrido más óptimo en términos de eficiencia. No siempre el camino más corto es mejor. Cuando nos sentamos al volante de un híbrido, es importante detectar aquellos tramos en los que se pueda recuperar una mayor cantidad de energía eléctrica, como los descensos o los trazados en curva. Más tarde, la energía almacenada en esos puntos se podrá emplear en ciudad para circular en modo cero emisiones.
2- Conduce con serenidad
Tanto en vehículos de combustión interna como en híbridos, mantener una velocidad constante favorece un menor consumo de combustible y evita que el sistema eléctrico tenga que trabajar para ofrecer potencia adicional. Ayúdate del control de crucero, aprovecha la inercia y en situaciones de proximidad o si te acercas a un resalto, trata de no frenar bruscamente o de zigzaguear y aminora progresivamente. Si respetas la distancia de seguridad, te resultará fácil. Y si vas a estar parado un rato, apaga el motor.
3- Ten tu coche siempre en buen estado
Cambiar los neumáticos o vigilar que tengan la presión correcta, no solo repercute en nuestra seguridad, también redunda en un descenso del consumo. No hay que olvidar tampoco los cambios de aceite, líquido refrigerante, bujías y filtros de aire. No es que haya que cambiar sin ton ni son o usar tal o cual marca, sino hacerlo cuando toque y según las especificaciones del fabricante. Ten en cuenta el kilometraje, el desgaste y las recomendaciones del modelo en cuestión, y déjate asesorar por un Concesionario Oficial Honda.
4- Papá, mamá, aquí hace calor. Poned el aire. Mejor baja la ventanilla. ¿Seguro?
Aire acondicionado o ventanillas abiertas. He ahí el dilema. La respuesta: alterna en función de las circunstancias. Si circulas en ciudad con velocidad limitada o estás en un atasco, mejor ventanillas abiertas. En autopista, recurre al aire acondicionado, pues a mayor velocidad, bajar las ventanillas perjudica a la aerodinámica del coche, el viento penetra en el habitáculo e incrementa la resistencia. Y gastamos más. Es recomendable situar la temperatura en torno a los 21 grados y activar el botón de “recircular el aire”.
5- Selecciona el modo de conducción idóneo en cada caso
Si tu vehículo híbrido cuenta con varios modo de conducción, utiliza siempre el más idóneo para maximizar la eficiencia energética. La tecnología híbrida e:HEV de Honda, por ejemplo, permite cambiar de manera automática entre los diversos modos de propulsión y obtener energía ya sea de la batería, del motor de combustión o del eléctrico.
Consejo extra…. Si no es imprescindible, déjalo
Llevar peso extra también aumenta el consumo. Si vas a viajar, saca del maletero todo lo que no sea imprescindible y en lo posible, evita bacas y cofres de techo. Nadie niega su utilidad a la hora de proporcionar más capacidad para equipajes, pero al romper la aerodinámica del coche, este requiere de más energía para moverse y eso, de nuevo, se traduce en un mayor consumo.